logo

Los vaivenes bursátiles, Vicente y Forrest Gump
25.3.08


Siempre me ha sorprendido los vaivenes de las bolsas: hoy baja un puñado de enteros, mañana se recupera un poquito, al día siguiente gana otro tanto y... una semana después ya ha recuperado las pérdidas con holgura. Bien es cierto que estos movimientos son producto de las leyes del mercado y de que la Bolsa es un mercado globalizado en el que los movimientos de entidades financieras, grandes empresas y fondos de pensiones e inversión, tanto nacionales como extranjeros, influyen decididamente sobre los índices. La rapidez con que los medios de comunicación transmiten cualquier movimiento significativo en los índices hace que los inversores particulares también maniobren velozmente.

El profesor Xavier Sala escribió un divertido artículo al respecto titulado ¿Dónde va la Bolsa? en el que reflexiona:
¿Dónde va Vicente? Donde va la gente. ¿Y por qué los grandes inversores venden, de repente, millones de acciones, cosa que precipita caídas en la bolsa? Pues porqué hacen como la demás gente, que sigue a Vicente. ¿Y qué hace Vicente? Pues vender, como la gente. O sea, que Vicente sigue a la gente y la gente sigue a Vicente. Y al final, todos se mueven como un rebaños de borregos, por los campos financieros del mundo. Y los mercados de valores suben y bajan sin que nadie lo pueda explicar."

Parece una respuesta demasiada simple que choca con la idea constatada de que los inversores suelen saber lo que hacen, lo que por otro lado es cierto. Sin embargo, hay algunas razones para pensar que los bolsistas, sean grandes o pequeños, se comportan como una manada de borregos.

Sala se apoya en estudios realizados por el profesor de Yale Robert Shiller que se dedicó a analizar las razones del crac del lunes negro de 1987. Shiller entrevistó "a miles de inversores de Wall Street, preguntándoles por qué habían decidido vender sus acciones repentinamente durante aquel fatídico lunes 19 de octubre. La respuesta fue sorprendente: "la mayor parte de los inversores vendieron porque veían que los demás inversores estaban vendiendo y los precios estaban bajando". Y yo me pregunto cómo se llamaba el primer inversor al que siguió la gente".

Y yo me pregunto, a su vez, ¿no tiene la crisis actual de confianza de las entidades financieras (de la que hemos hablado aquí en varias ocasiones: I y II) algo de todo esto?

Para terminar este artículo, os dejo con la célebre e ilustrativa secuencia de Forrest Gump en la que el protagonista se dedica a correr de costa a costa durante "tres años, dos meses, catorce días, y dieciséis horas", recoge apoyos y ánimos, suma corredores por cada localidad que pasa, es entrevistado por los medios, etc. La gente, al ver pasar al grupo, se preguntaría: ¿dónde va la gente? Donde va Forrest. Como en la Bolsa.



| Categoría: Sociedad | Etiquetas: Sala_i_Martin Bolsa inversion globalizacion |

| Permalink | Enlaces a este artículo | Enviar por correo-e |

Marcadores sociales: Meneame | Fresqui | Facebook | FriendFeed | Google Bookmarks | Yahoo! My Web | Technorati | Twitter | Delicious |

1 Comentarios:

El 3/25/2008 10:15:00 p. m., Blogger Senior Manager tuvo la amabilidad de comentar aquí:

Si la gente supiera como se manipula el mundo a través de los mercados bursátiles, las economías se caerían como un castillo de naipes... Por eso las grandes potencias tienen tanto miedo a las economías emergentes en países del 3er mundo, pues no son controlables en el corto plazo, así que no sé que será mejor, incluirlos entre los grandes o dejarlos rezagados...

 

Publicar un comentario

<< Principio


2.0