Mail, el programa de correo-e que incluye Mac OS X no tiene soporte para firmar y cifrar mensajes mediante el estándar de seguridad gratuíto PGP o su variante OpenSource GPG. Sin embargo, éste sí puede utilizarse a través de la cónsola del sistema operativo para firmar y cifrar ficheros, gestionar las claves públicas y privadas, revocar certificados... Es decir, estos programas de criptografia se pueden utilizar desde la cónsola pero no desde el cliente de correo-e.

Esta carencia es suplida por GPGMail, una pequeña aplicación que permite a Mail firmar, cifrar y gestionar todo lo referente a la seguridad. Basada en GPG, su instalación es muy sencilla gracias a un script que automatiza todo el proceso sin la intervención del usuario.

Mientras tanto, la versión de Mail que incorporará Leopard vende sus tarjetas-recordatorios o las plantillas de documentos diseñadas por profesionales. Afortunadamente incorpora un lector RSS y la gestión de tareas o “to do”, pero de GPG, nada de nada.

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