logo

Número aúreo y el curriculum talismán
5.2.06


Un compañero me dice que acaba de presentar su curriculum vitae para optar a un puesto en la Universidad. Como últimamente ha presentado unos cuántos y está harto de verlo siempre el mismo formato sin resultados positivos u ofertas de trabajo realmente interesantes, decidió que debía rehacer la presentación de su curriculum para ver si su suerte también cambiaba. Como es muy amigo de los juegos matemáticos, eligió al número aúreo como talismán o amuleto para modificar el diseño de su curriculum y conseguir una oferta de trabajo interesante.

A falta de seguir perfeccionando su curriculum aúreo, nombre con el que ha bautizado el nuevo formato, y de seguir introduciendo más este número en las medidas y proporciones de su curriculum, lo que hará más adelante, ha decidido que todos los que presente a partir de este momento tendrá una mancha con las siguientes medidas: 155,00 x 250,79 milímetros. La proporción entre ambas medidas es el número aúreo.

Para los neófitos, una hoja de tamaño A4 posee unas dimensiones de 297x210mm; tendrá una mancha o espacio reservado para el texto de 277x190mm si a cada lado, al componer la página, se deja un margen de 10mm.

A grosso modo, este es la explicación que justifica la utilización del número aúreo en su curriculum.

En la matemática hay tres grandes números irracionales: π, utilizado para relacionar la longitud de la circunferencia con su diámetro; el número e descubierto por Euler relacionado con la obtención del límite de una sucesión determinada y Φ, conocido como número aúreo y que fue enunciado por primera vez por el escultor griego Fideas a través de sus obras.

Φ es el único de los tres que puede expresarse mediante una ecuación polinómica:

El número aúreo aparece en alguna de las medidas o proporciones del Partenón griego, la Gran Pirámide de Keops, la Tumba Rupreste de Mira, la planta del Monasterio de El Escorial y en obras pictóricas como la Leda atómica de Dalí o el dibujo de Leonardo da Vinci que sirvió para ilustrar el libro La Divina Proporción de Luca Pacioli editado en 1509.

A partir de Φ se desarrollan la sección aúrea, el rectángulo áureo, la espiral polinómica, la satánica estrella pentagonal o la sucesión numérica de Fibonacci.

La sucesión numérica de Fibonacci tiene características muy curiosas: a partir del tercero dígito de la sucesión, cada término de la sucesión es igual a la suma de los dos anteriores: 1, 1, 2, 3, 5, 8, 13, 21, 34, 55, 89, 144, 233, 377, 610, 987, 1597, 2584…

Otra característica es que la relación entre cualquiera términos y su inmediatamente anterior da como resultado el número aúreo Φ. Por ejemplo, eligiendo los dígitos 15 y 16 de la sucesión, es decir, los números 987 y 610, el resultado de su división es 1,61803278689. Cuánto mayor sea el lugar que ocupan los términos en la sucesión, mayor será su aproximación al número aúreo.

Al margen de connotaciones esotéricas, lo que sí parece innegable es que el número aúreo y la sucesión de Fibonacci se han instalado en nuestras vidas y se encuentra presente en la Naturaleza. Por ejemplo, las margaritas tienen generalmente 34, 55 u 89 pétalos y las piñas 8 diagonales en un sentido y 13 en el otro. Todos ellos son dígitos consecutivos incluidos en la sucesión de Fibonacci y cuya división da el número aúreo.

Sólo resta desearle mucha suerte con su curriculum aúreo.

>> Publicado en Categoría: Misc

| Permalink | Enlaces a este artículo | Enviar por correo-e |

Marcadores sociales: Meneame | Fresqui | Facebook | FriendFeed | Google Bookmarks | Yahoo! My Web | Technorati | Twitter | Delicious |

0 Comentarios:

Publicar un comentario

<< Principio


2.0